Las pesadillas recurrentes son mucho más que sueños malos

Todos, o por lo menos la gran mayoría, ya hemos tenido pesadillas alguna vez. Son sueños que tienen un contenido aterrorizante. Provocan ansiedad y miedo. Lo normal es despertarse súbitamente y sentir el corazón en la mano. La sensación de temor persiste, incluso después de despertar. También pueden aparecer sentimientos de confusión y tristeza.

Las causas que dan lugar a una pesadilla son muchas. Surgen debido a la ingestión de determinadas sustancias, al cansancio, problemas alimentarios o dificultades emocionales. Cualquiera que sea el caso, significa que no hay una buena higiene en el sueño.

"¿Quién dijo que los sueños y las pesadillas no son tan reales como el aquí y ahora?"
-John Lennon-

La situación se complica cuando la pesadilla se vuelve recurrente. A veces aparece el mismo sueño repetidamente, como si estuviera impreso, marcado. Otras veces cambia el contexto, pero el esquema sigue siendo básicamente idéntico. Es en estos casos que es importante prestar atención a lo que está sucediendo.

Pesadillas puntuales y pesadillas recurrentes

Las pesadillas puntuales son aquellos sueños de angustia que aparecen esporádicamente. Es aceptable tener una pesadilla cada tres meses, esto está dentro del margen que puede ser considerado "normal". En estos casos, cada pesadilla tiene un contexto diferente de los anteriores.

Las causas para que este tipo de pesadilla aparezca pueden ser:

  • Un estado de estrés pasajero.
  • Consumo de alcohol.
  • Consumo de psicoactivos.
  • Consumo de algunos medicamentos con efectos colaterales sobre el sueño.
  • Despertar en el medio de la noche con frecuencia, causando fatiga.
  • Cena muy tarde o de forma exagerada antes de dormir.

Para controlar este tipo de pesadilla basta con eliminar el factor que las origina. Es importante hacerlo porque, de lo contrario, pueden afectar el descanso. Lo mejor es cenar temprano y evitar el consumo de bebidas alcohólicas u otras sustancias al menos dos horas antes de acostarse.

Las pesadillas recurrentes, por otro lado, surgen cuando la persona es incapaz de reconocer un conflicto que posee en la vida real. Puede ser un síntoma de estrés post traumático o la expresión de una dificultad para aceptar rastros de sí mismo o de ciertas situaciones. Como eso está en el inconsciente, sólo tiene la posibilidad de emerger a través de sueños de angustia.

Los contenidos más comunes de las pesadillas recurrentes

Hay algunas pesadillas recurrentes cuyos contenidos son muy comunes. Representan conflictos típicos del ser humano, aunque sólo cada individuo puede necesitar su significado exacto. Los contenidos más frecuentes y su significado básico son los siguientes:

  • Persecuciones. Representa la dificultad de aceptar una parte de nosotros mismos que, inconscientemente, juzgamos como sombría o reprobable.
  • Caídas. Expresa temor de sentirse abandonado o sin apoyo.
  • Alta velocidad. Tiene que ver con la sensación de estar fuera de control.
  • Pruebas. La pesadilla se relaciona con ser reprobado, llegar tarde o sin preparación. Hace alusión a la falta de seguridad en sí mismo con relación a una situación que debe afrontar en el presente o futuro inmediato.
  • Parálisis. Está relacionado con el sentimiento de estar estancado, la falta de metas genuinas y la dificultad de expresar las emociones.
  • Nudez. Generalmente la persona sueña estar desnuda en público sin que los demás perciban. Tiene que ver con inseguridad en algún aspecto de la vida, en el que existe una sensación de sofoco o falta de capacidad.
  • Mutilación. Son pesadillas donde la persona pierde los dientes, un brazo, una pierna, etc. Hablan de una parte de la vida que fue ignorada o maltratada.
  • Estar atascado. Se relaciona con aspectos de la vida que están reprimidos o bloqueados.
  • Ahogamiento. Generalmente existen grandes mareas o aguas turbulentas. Tiene que ver con una explosión de emociones, que no pueden ser expresadas o incluso reconocidas.
  • Bebé o animalito pidiendo atención. Habla de un aspecto de la infancia, o un elemento vulnerable de la personalidad que reclama atención.

Aunque las pesadillas recurrentes son desagradables ya veces muy aterrorizantes, en realidad necesitan ser vistos como un elemento positivo y valioso. Es una forma que el inconsciente tiene que enviar un mensaje sobre algún asunto que ha sido ignorado y que necesita ser mirado.

Lo ideal es que el conflicto con nosotros mismos, que aparece durante la pesadilla recurrente, encuentre un medio de solución. Lo normal es que si esto ocurre, el sueño se presenta con contenido similar, pero con resultado positivo. Esto indica que la angustia fue disipada y que los sueños terribles ya no son necesarios.