Ser usted mismo cuando la mayoría piensa como usted, donde el ambiente es propicio, es fácil. El desafío es mantener su integridad en un lugar en que la mayoría piensa y actúa diferente de usted. Desafío aún mayor: conseguir permanecer con sus principios y sus valores inalterados, no dejarse corromper donde prevalecen las adversidades. Por supuesto, hay que estar muy consciente y seguro de quién eres y de lo que piensa no formar parte del grupo o parecer más uno en medio de la "manada".
Quien vive todo el tiempo con miedo, con los pies atrás, no construye, no cambia, no vive, no camina, y aún es maniobrado!
Claro, es siempre prudente actuar con cautela con personas y situaciones que no conocemos, principalmente cuando desconfiamos de algo. Muchas personas pasan una imagen alejada de su verdadera esencia, quizá porque creen que el personaje que visten es mucho más interesante que ellas en realidad. Puede que ni ellas se acepten de la manera que son. Muchas veces es necesario dar un tiempo y esperar que el otro se muestre, se disipa o da indicios de lo que pretende hacer. No es sabio deducir o juzgar previamente, pues podemos llegar a conclusiones equivocadas y ser livianos. Pisimos tener paciencia y templanza, pues tarde o temprano la gente se muestra.
Nadie pasa todo el tiempo fingiendo lo que no es. Dará trabajo a disimular, poner la "fantasía" y la "máscara" todos los días, demanda tiempo y energía. Si en el momento eso no sucede, la manera es esperar. No tarda, y luego sabremos quién es el sujeto y qué ha venido.Impresionante, pero casi nadie escapa. Basta que surja una oportunidad y, prontamente, la persona se desnuda, y una de sus facetas se presenta frente a nosotros, de la manera que siempre ha sido y es. En el caso de que se trate de una persona que no sea de su familia, no es la primera vez que se trata de una persona, no sobra ni el barniz. Es también la oportunidad que tenemos para constatar quiénes son nuestros verdaderos amigos, porque compañías para divertirnos, tomar cerveza, hacer barbacoa y jugar baraja, hay innumerables, siempre listos, a disposición. Estas personas se creen más inteligentes que otras y todavía piensan que las demás son tontas y pueden ser manipuladas con cierta facilidad, que nunca descubrir su verdadera faceta, por eso viven pasando atestado de tontos ... Creen que engañan con actitudes, con palabras y sonrisas falsas, con un montón de medias verdades o con las baboseiras que dicen ... Desafortunadamente, aparentar ser alguien no basta, y la mayoría lo hace. Para ser una persona de verdad, hay que demostrarse y hacer por donde.
Es necesario tener principios firmes, sólidos y no maleables de acuerdo con la situación o la conveniencia , o el individuo los tiene o no, no puede inventar en una circunstancia de emergencia.Carácter no es músculo que se flexiona según el momento o el interés, ni es mutable
Requiere una buena educación, una base sólida y muchos buenos ejemplos, si queremos pasarlo. Todo esto no depende de la situación financiera, pues hay muy pobre simple y educado y muy rico sin educación y grosero. De la misma forma, la honestidad no está vinculada al patrimonio, ni a dinero. No puede ser honesto; o el sujeto es honesto y decente, o no lo es. Es un hecho que esos valores vienen en rara vez cada vez más, no es para cualquiera, diría para muy pocos.
Las grandes personas, no las pretendidas, son reconocidas en las pequeñas actitudes
, en los pequeños gestos, en los detalles, en las sutilezas, en las minucias ... Ellas son simples, claras, directas, honestas, no enrollan, no engullen ni nos tratan "vender" algo que ni siquiera tienen para entregar. Las que fingen todo el tiempo son pura engaño, pero cada uno es cada uno.