Los trastornos mentales son como enfermedades de la mente. Puede ser bastante difícil entender esto a partir de explicaciones abstractas. Pero podemos intentar explicar los trastornos mentales comparándolos con construcciones. Si los trastornos mentales fueran casas, la depresión sería la más solitaria. La ansiedad sería como una prisión asfixiante. El insomnio sería un lugar habitado por relojes sin punteros, porque allí el tiempo no pasa. Fue eso lo que pensó Federico Babina, un arquitecto que quiso mostrar para nosotros cómo serían las realidades de nuestra mente cuando ésta se convierte en nuestro mayor problema.
Quien ya pasó por o sufre ahora mismo de algún tipo de trastorno mental con certeza se identificará con ese curioso e impactante trabajo artístico. Pero tampoco es necesario sentir en la propia piel esas cuestiones para entenderlas. Esto es porque muchos de nosotros tenemos contacto directo con personas que ya han tenido o tienen trastornos mentales: alguna persona con Alzheimer, algún pariente con esquizofrenia, trastorno del espectro autista, algún tipo de fobia o incluso insomnio crónico. "El dolor mental es menos dramático que el dolor físico, pero es también más común y más difícil de soportar".
C. Las características de estas condiciones de la mente humana describen lugares en los que podemos quedar atrapados, aislados, o incluso perdidos. Por más evidente que esto parezca para la mayoría, hay personas que todavía no entienden la posibilidad de enfermar por la mente, o siquiera creen en ello. Los trastornos mentales, queramos o no, siguen siendo estigmas en nuestra sociedad. Cada persona, sin embargo, es un mundo. Y cada mente está atrapada dentro de paredes bastante gruesas que la separan de la realidad. Eso es lo que siente Federico Babina.El arquitecto italiano quiso traer visibilidad desde su campo de trabajo hacia la dureza de esas enfermedades y trastornos mentales.Este proyecto fue llamado "Archarium", en un juego de palabras entre las palabras arquitectura y psiquiatría en inglés, y merece ser conocido.
¿Y si los trastornos mentales fueran casas? 1. La depresión La depresión es uno de los tipos de trastornos mentales más frecuentes.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) llega a considerarla una epidemia. Lejos de tener curas rápidas o obvias, la cuestión puede convertirse en los próximos años en una de las principales causas de incapacidad entre las enfermedades. Por otro lado, algo que a menudo descuidamos y que las instituciones médicas tratan de recordar es que la depresión aumenta el riesgo de aparición de otros problemas. Las enfermedades del corazón, la diabetes o incluso el abuso de sustancias químicas tienen su riesgo aumentado entre los depresivos.
Es una realidad muy grave, una enfermedad que termina con nuestra calidad de vida.
La condición consume todo nuestro hogar: usted no pierde solo el suelo, pero puede perder también el techo, las paredes ... 2. La ansiedad
La ansiedad es, para Federico Babina, una casa contenida por rejas. Cercada por alambre de púas, por espinas que nos hacen prisioneros de un escenario que se vuelve cada vez más pequeño y más asfixiante. Como podemos ver, este tipo de trastorno tan común en los días actuales está casi en el orden del día debido al ritmo de nuestras vidas. Él es representado por un lugar donde no hay puertas ni ventanas. La ansiedad nos rodea y nos deja sin salida. 3. La esquizofrenia
La esquizofrenia es un trastorno cerebral grave.
La persona se ve sometida a un deterioro psicológico progresivo que poco a poco mina las capacidades de racionalizar y de procesar la información, la percepción, la voluntad y las emociones. La mente se fragmenta. Hay un completo desorden y pedazos caen de forma irremediable y terrible. Federico Babina representa esta situación muy bien con una imagen. Podemos ver a una persona sosteniendo con mucha dificultad en un pequeño pedazo de la casa que está viniendo abajo.
No podemos olvidar que la esquizofrenia es un tipo de demencia temprana.
Algo que muchas personas no saben es que los pacientes con esta enfermedad, que comienza temprano, suelen morir de forma prematura. Perden una o dos décadas de vida con el diagnóstico. 4. El mal de Alzheimer
El mal de Alzheimer es uno de los trastornos mentales más tristes. Es también uno de los que tiene más impacto a nivel familiar. Actualmente, no hay tratamiento posible que pueda revertir o parar ese deterioro cognoscitivo. Si esa enfermedad fuera una casa, sería una construcción en decadencia. Un lugar que un día fue bellísimo pero que ahora se está quebrando, se está disolviendo, desmontando poco a poco por el impacto del tiempo ...
5. Trastorno del Espectro Autista
El trastorno del espectro autista es un trastorno neurobiológico del desarrollo. Tal como la propia terminología indica, cada persona se sitúa en un punto determinado de ese amplio espectro. De esta forma, no hay dos niños iguales, ni dos adultos con las mismas características. Cada uno tendrá más o menos comportamientos repetitivos, una mayor o menor capacidad intelectual y diferentes aberturas para el uso del lenguaje.
Lo que suele caracterizar a la persona con este trastorno, sin embargo, suele ser su aislamiento social. Su hermetismo personal. Así, si esa condición fuera una casa, sería en realidad una casa dentro de otra casa. A su vez, habría otra casa aún menor dentro de la última casa.
Es un laberinto psicológico en el que la persona queda atrapada en los muros de su propia mente ... Para concluir, y como podemos ver con estos ejemplos por encima de la obra de Federico Babina, los trastornos mentales pueden ser representados de muchos modos. Todos, sin embargo, tienen un punto en común: el sufrimiento y el aislamiento. Los pacientes, esas personas con nombre y apellido que quedan atrapadas en sus propios muros, en el caos de su propio micro universo, sufren sin ventanas ni puertas y sin nadie que pueda entrar.