El 24 de marzo de 2015, el mundo entero quedó sorprendido por el accidente aéreo de un avión Airbus A230 en los Alpes. A bordo, 150 personas y 5 perros, una tragedia de grandes dimensiones que movilizó de inmediato a varios países. La población mundial, esperanzada y con el corazón apretado, buscaba respuestas sobre el desastre. Fue entonces que
comenzó el debate casi automático sobre la seguridad , o falta de ella, en las líneas aéreas de bajo costo, sobre la vida útil de un avión que, tal vez, ya no debería estar en el aire. Durante varias horas todos buscamos mil razones, mil orígenes para lo ocurrido con esas máquinas que a veces fallan, pero forman parte de nuestras vidas.La tecnología a veces falla, sabemos, los accidentes ocurren y el origen
se debe casi siempre a un descuido, a un error , oa un mal mantenimiento.Pocos pensaron que el responsable podría no ser la "máquina", sino el hombre
. Un joven copiloto que, de forma deliberada, derribó el avión en los Alpes franceses, llevando con él todas las vidas que estaban a bordo.¿De qué modo podemos entender este tipo de cosas?
El ser humano necesita siempre encontrar un por qué, una razón que justifique (si es que puede ser justificado) este tipo de acto inconcebible que se instala en esa parte aún tan oscura de nuestra naturaleza, donde lo irracional, la enfermedad tal vez , o el simple acto de causar el mal, se hace presente. ¿Qué llevó a Andreas Lubitz a derribar el Airbus A320 en los Alpes?Analizamos las posibles causas, basándose en toda la información que se nos ha transmitido, para tratar de encontrar un "por qué".
Un piloto certificado como "apto" pero con problemas psicológicos Andreas Lubitz estaba solo en la cabina del avión cuando, de repente, de modo voluntario, decidió apretar el botón de descenso para que él y el resto de los pasajeros
perdieran la vida chocando contra los Alpes .Según la compañía "Lufthansa" el copiloto del Airbus A320 había sido declarado apto para su ejercicio profesional; nadie sospechaba de nada y era considerado como una referencia de competencia y profesionalismo. No obstante, se encontró un informe médico donde se cercioraba que no estaba apto, que sus condiciones psicológicas no eran las más adecuadas para seguir trabajando.Lubitz, era consciente de ello, pero, lejos de aceptar la situación, había rasgado dicho informe sin que la compañía tuviera conocimiento de él, comparando su puesto de trabajo cuando, en realidad, nunca más debería haberlo hecho.Según las informaciones que fueron publicadas, Andreas Lubitz padecía una depresión severa.
Él estaba en proceso de separación de su novia, con problemas afectivos que tal vez podrían haber ocasionado esta reacción suicida.
Ahora se deduce que estos trastornos depresivos eran constantes en su vida, que ya había pasado por algo parecido hacía algún tiempo, recibiendo tratamiento por un serio episodio de depresión. La depresión severa y el "suicidio ampliado"
La pregunta sería la siguiente:puede una depresión severa llevar a una persona no sólo al suicidio, sino también a provocar la muerte de 150 personas?
A la hora de hablar de la depresión hay que tener en cuenta que
ningún problema psicológico es igual en todas las personas
, es decir, no hay un patrón único y fácilmente identificable. Con frecuencia, pueden existir diversos trastornos asociados, puede ser que en lugar de una depresión severa, sufra de una depresión psicótica. No sabemos si era su caso. - Las razones por las que una persona se deprime pueden ser muy variadas y complejas, pero siempre existe una sensación de pérdida del control sobre su situación vital y sus emociones, además de una visión muy negativa del futuro. No hay esperanzas. Cuando estas sensaciones se amplifican, es común que se instale el deseo de suicidio.
- Normalmente, la depresión que se cruza con ideas de suicidio suele estar en el 15% de los pacientes con este trastorno. Pero, lo que no es común es que a las tendencias suicidas, se sumen las homicidas. Lo que no es habitual es una persona querer acabar con la propia vida junto con el deseo y elegir también de "castigar" a más personas y, principalmente, a personas no relacionadas afectivamente con ella. - En el caso de existir esta voluntad, ya estaríamos hablando de un "suicidio ampliado".Esto es, son situaciones en que la persona, además de acabar con su propia vida, intenta llevar consigo la vida de inocentes. Su desesperación y frustración son tan grandes que no pueden causar más daño a él, por lo que la persona busca magnificar su deseo de agresión también para los demás. Hay rabia y deseo de venganza.
- En el caso de Andreas Lubitz sabemos que, por ejemplo, su gran obsesión era volar.
Probablemente, sus problemas afectivos le hicieron recaer en una nueva depresión, un proceso que, al parecer, era algo latente en su estado psicológico y que ya le había ocurrido en el pasado y retrasó la obtención de su título de piloto. Ahora, ese informe psicológico que concluía que él no era apto para el trabajo y que no podía volar ", es sin duda el desencadenante para pensar no sólo en el suicidio, sino también en la venganza.Ese sería su último vuelo, y su dolor, no se sentiría sólo por él. El sufrimiento iba a adquirir dimensiones ampliadas y, sin lugar a dudas, lo logró. Algunos estudiosos explican que estos actos incomprensibles, en ciertas ocasiones, son causados por lo que llaman síndrome de Amok
, es decir, una reacción espontánea e incontrolable de causar daño a los demás, de matar de modo indiscriminado. Para muchos, el acto terrible que cometió Andreas Lubitz puede haber sido perfectamente premeditado. Incluso, sospechan que los Alpes tenían algún significado para él, ya que según dicen, él mantenía una obsesión por este paisaje.
La gente siempre necesita encontrar una explicación frente a actos como el ocurrido con el Airbus A230.Queremos saber y entender las razones que llevan a un hombre, aparentemente normal, a acabar con la vida de 150 personas. Aunque a veces tengamos que aceptar que el lado irracional, como la maldad, existe y está ahí, escapando siempre de nuestro control. Imprevisible y voraz, el mal puede llevar la vida de los que más amamos sin dar explicaciones. De este nuestro espacio, enviamos nuestro más sincero apoyo a los familiares, y nuestro homenaje y respeto a las víctimas.
Descansen en paz.