Las buenas relaciones amorosas nos hacen crecer como personas. Los dos integrantes se sienten cómodos y trabajan para encontrar la felicidad mutua.
Las relaciones amorosas negativas nos hacen caer en patrones poco sanos. Usted sentirá que están cortando sus alas, que su vida no es tan feliz como debería, y tendrá la sensación de que algo está mal.
Revise las siguientes 10 cosas que usted nunca debe sacrificar por una relación amorosa:
1. Su felicidad
No se olvida de que usted tiene el derecho de vivir feliz siempre. Habrá momentos en los que las cosas no van a salir bien ... Pero su compañero debe ser un motivo de felicidad y alegría en su vida.
Cuando esa persona tan importante hace que te sientas mal o triste de forma constante, hay algo mal en la relación.
Algunas personas necesitan trabajar en sí mismos antes de tener una relación amorosa sana y feliz.Compartir
2. Su alegría
¿Usted se ríe con su compañero? En todas las parejas existen desentendimientos, pero las relaciones amorosas sanas están llenas de momentos alegres.
Es importante poder disfrutar de la vida con amigos, con su compañero y con su familia. Todos añaden un toque de alegría a su vida. Su compañero debe entender y respetar esa necesidad. 3. Su libertad
Una relación amorosa sana le dará la posibilidad de ser usted mismo
sin que su compañero se incomoda o el límite. Los comportamientos posesivos son comunes en personas inseguras, y usted no podrá hacer nada para acabar con ellos.
Una relación amorosa sana está compuesta por dos personas que disfrutan del tiempo que pasan juntas, pero que también necesitan un tiempo a solas. 4. Su paz interior
La paz interior es básica para ser feliz.
Alguien que constantemente se siente ansioso, enojado, nervioso o depresivo la hará mal.
Es común ver parejas que pasan la vida peleando. Si ese es su caso, pregunte a sí mismo: ¿La relación realmente tiene futuro?
Quiero pasar el resto de mi vida así?
- ¿Me hace feliz? ¿Lo hago feliz?
- Vale la pena continuar?
- Hay relaciones que deben romperse para que las dos personas tengan una vida plena siguiendo su propio camino.
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5. Sus experienciasLa vida es excitante. A lo largo de la vida tienes experiencias que la llenan de conocimientos y alegrías.
Vivir a dos es una experiencia que puede ser satisfactoria, pero no debe limitarla.
"La experiencia no es lo que te pasa, sino lo que haces con lo que te sucede" -Aldous Huxley-
CompartirEs importante vivir cosas nuevas junto a la otra persona. Desafiarse y encontrar nuevas experiencias. En una relación amorosa debemos sentirnos motivados a vivir cosas nuevas con seguridad y respeto. 6. Su personalidadSu personalidad es quién usted es y la persona adecuada le amará con todo lo que eso implica.En una relación amorosa sana, ninguna de las dos personas intentará cambiar a su compañero.
El amor no selecciona qué características le gustan y cuáles deben ser eliminadas.
Claro que usted puede tratar de cambiar las características que hacen mal a todos, como la inseguridad, pero debe haber respeto por quien la otra persona es, por su esencia.
7. Sus relaciones
Cuando comenzamos una relación, queremos pasar todo el tiempo juntos.Con el tiempo, usted percibirá que necesita momentos con otras personas que son importantes para usted.
Si viene que han pasado algunos meses y usted nunca tiene la posibilidad de ver a la familia y amigos, posiblemente está en una relación posesiva.
Es importante tener muchas relaciones que le den soporte, y saber que depender de su compañero para todo no es sano. 8. Sus sentimientos
El respeto es un pilar de las relaciones sanas. Las dos personas deben ser capaces de escuchar y entender las opiniones y sentimientos del otro sin juzgar.
¿Toma en cuenta los sentimientos de su compañero? ¿Se toman en cuenta los suyos? 9. Sus sueños
En una buena relación, las dos personas se apoyarán de forma constante
. Cada uno tendrá sus propios sueños, pero deben acompañarse en el camino.
Al final, el amor es acompañar al otro en la búsqueda de sus sueños
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10. Sus creenciasSus creencias e ideales son importantes. Nadie debería tratar de cambiar su religión o su fe.
Una pareja que no tiene las mismas creencias puede funcionar siempre que haya respeto mutuo.Texto original en español de Okairy Zuñiga.