Una relación de pareja nos prueba constantemente porque establece un contacto íntimo donde afloran todos nuestros miedos e inseguridades. Para los terapeutas de parejas, hay cuatro factores determinantes que causan el final de una relación. Es a ellos que dedicamos este artículo.
Estar involucrado en cualquiera de estos comportamientos es una señal de que necesitamos cambiar un aspecto importante en nuestro modo de relacionarnos con el otro. De lo contrario, estaremos alimentando el conflicto y aumentando la probabilidad de que la relación termine.
Las discusiones, los malentendidos y las divergencias forman parte de una relación de pareja. Sin embargo, hay muchas maneras de comunicar nuestras emociones y algunas de ellas son muy destructivas. Son estas formas de expresión que tendremos que "dejar de lado" si queremos ser comprendidos y fortalecer nuestra relación. "El primer paso es concientizarse de que el amor es un arte, así como vivir también es un arte. Si queremos aprender a amar, debemos proceder de la misma manera que haríamos para aprender cualquier otro arte, música, pintura, carpintería, o el arte de la medicina o la ingeniería. "
-Erich Fromm-
1- Las críticas destructivas
Las críticas hieren, destruyen y causan sufrimiento.
Su poder es tan grande que, por sí solo, pueden destruir una relación, especialmente cuando se dirigen a la persona (no al comportamiento oa través de un mensaje en la primera persona) y la persona no tiene la oportunidad de responder. Dentro de una relación, son armas cargadas por el propio diablo. La crítica es diferente de la queja
. La queja es algo específico, que incide sobre el acto en sí, y no directamente en la persona. Cuando decimos "Hoy he notado que usted está distraído" es diferente de "Usted nunca presta atención en mí". La crítica incluye culpa y difamación, de modo que esto puede traer sufrimiento a la otra persona.2- El desprecio
El desprecio es, posiblemente, el peor de estos cuatro comportamientos que estamos analizando.
Cuando menospreciamos a nuestro compañero, estamos envenenando la relación, causando una herida muy profunda . El desprecio destruye lo que es básico en una relación: el respeto que debemos tener el uno por el otro.Es difícil alcanzar una reconciliación cuando hubo algún tipo de desprecio anteriormente. Este comportamiento genera conflictos y disgustos que son difíciles de administrar.
CompartirEl sarcasmo, la burla y el escepticismo forman parte del desprecio. Debemos ser conscientes de que cuando nos comportamos así, porque aprendemos a relacionarnos de esa forma, resulta muy difícil reparar los conflictos y los sufrimientos.
3- Actitud defensiva
Una actitud defensiva dificulta la comunicación porque creamos una barrera y culpamos a nuestro socio por eso. Nosotros distorsionamos los mensajes, las interpretamos subjetivamente con el objetivo inconsciente de ocultar nuestra vulnerabilidad. Con esta actitud bloqueamos el diálogo y el tono afectivo para dar lugar a malentendidos y al distanciamiento emocional.
Cuando nos sentimos atacados creamos un escudo a nuestro alrededor,y mostramos todas nuestras armas transformando la relación en un "campo de batalla".
Adoptando una actitud defensiva estamos enviando el siguiente mensaje a nuestro socio, "el problema no es mío, es suyo; de esta forma, logramos aumentar el conflicto. Compartir 4- Actitudes evasivas
Un enfoque violento en una discusión de pareja trae a la superficie los factores discutidos arriba.Las críticas y el desprecio pueden llevar a una actitud defensiva,
que posteriormente, cuando la distancia se instala entre la pareja, genera una actitud evasiva.
En este punto de la relación, cuando hay que distanciarse para sentirse bien, será necesario mucho compromiso, diálogo y buena voluntad por parte de los socios para que la relación no termine. Podemos ignorar el problema o ignorar el otro, pero de esa forma no conseguiremos resolver nada.La actitud evasiva es un indicador claro de que el amor está acabando
. Por otro lado, este indicador ocurre más frecuentemente entre parejas que ya pasaron mucho tiempo juntos y no dieron la debida importancia a otros factores que indicaban sus dificultades en relacionarse y amar. "En el acto de amar, de entregarse, de sumergirse en el mundo interior de la otra persona, me encuentro a mí mismo, me descubro y descubro a los dos, descubro al hombre".
-Erich Fromm-