El corazón unifica todos los aspectos de una persona. Es el órgano que canaliza el amor, comprende lo incomprensible y perdona lo imperdonable. Cualquier cambio en la vida desencadena comportamientos diferentes de forma irracional, y si estos cambios son muy grandes y permanecen por mucho tiempo, cambian la personalidad, la forma de tomar decisiones, y la forma de actuar a nivel emocional. Nuestro corazón es el centro de donde emanan las emociones más auténticas y poderosas, las mismas emociones que mal administradas provocan daños irreversibles en la forma de enfermedades cardíacas.
Cuando las emociones básicas están desreguladas, como el miedo y la tristeza, puede ocurrir una repetida represión de las necesidades expresivas de ese órgano
, resultando en una sobrecarga emocional. Los problemas del corazón se manifiestan como arritmias, palpitaciones, infartos, pulso débil, hipertensión y aprieto en el pecho. ¿Cuál es la relación entre el corazón y las emociones?Algunos estudios muestran que la comunicación entre el cerebro y el corazón es una "vía de mano doble"
. Es decir, el corazón envía señales al cerebro y el cerebro envía señales al corazón. De esta forma, cuando el corazón late de forma coherente (no estresado), envía señales al cerebro para eliminar el estrés a través de un proceso de reducción de hormonas del estrés y aumento de hormonas positivas.
La frecuencia cardíaca es el reflejo de nuestro estado emocional. El equilibrio emocional de una persona se refleja en su ritmo cardíaco, que a su vez se esparce por todo el cuerpo.El cuerpo interpreta estos batidos y manifiesta físicamente los estados emocionales negativos como estrés, miedo, tensión o estados emocionales positivos, exteriorizados como alegría, tranquilidad, paz, etc.
El cambio psicológico que ocurre con la modificación de la función cardíaca está vinculado a la conciencia interceptiva , es decir, la forma en que nuestro cerebro interpreta el estado interno de su propio cuerpo en ese momento. Las emociones no están en el cerebro o en el corazón, están interrelacionadas.
CompartirCómo las emociones afectan al corazón
Los problemas cardiacos, en su gran mayoría, son consecuencia de los desequilibrios emocionales que se manifiestan como nerviosismo, ansiedad, descontrol emocional, comportamiento maníaco depresivo, histeria, risa excesiva o inadecuada, tristeza, vulnerabilidad , apatía, hipersensibilidad, insomnio, falta o pérdida de memoria.Todos estos desequilibrios emocionales pueden dañar el corazón y provocar problemas en la parte superior del abdomen, debilidad, calor, fatiga, tensión corporal, depresión, dolor de cabeza, extremidades frías, dolor en el hombro, mareos y / o sudoración excesiva.
Necesitamos conscientes de que
todos estos síntomas causados por el desequilibrio emocional causan muchos problemas cardíacos. Refleja sobre sus objetivos y la manera como encara la vida para armonizarse a través de los pensamientos, sentimientos y acciones.
Esta toma de conciencia deriva de la racionalización, de una visión clara y objetiva de la vida, y de la percepción de lo que nuestro corazón quiere decir, tanto a nivel físico y emocional.
Controlar los estados emocionales negativos y fomentar los positivos es el primer paso en el camino de la curación y la transformación personal que nos ayudará a mantener una buena salud emocional y cardíaca. ¿Cuál es el único órgano que, aun sacudido, sigue funcionando?