¿Por qué algunos "ex" regresan a nuestra vida sólo cuando ya estamos bien? Existen relaciones basadas en idas y venidas constantes, más que en una relación cariñosa y gratificante. La misma persona que no estuvo presente cuando más necesitamos de repente vuelve cuando ya conseguimos recuperarnos. Lo que pasa es que muchas veces esas personas no vuelven por nosotros, sino para buscar un poco más de ego.
El ego le gusta que todo suceda de acuerdo con sus expectativas. Cuando nuestro ego domina la forma en que amamos, nos vemos en una ruleta rusa en la que vamos a ganar cuando nuestros deseos más caprichosos y egoístas sean realizados. Las personas con un ego acentuado buscan principalmente ser reconocidas por los demás y, en especial, por sus socios, porque ellas no son capaces de reconocerse a sí mismas.
Para poder conquistar una relación gratificante para ambos lados, debemos negociar con los deseos en nuestro "yo". Así, conseguiremos una relación en la que los dos se sienten bien. En ese sentido, el amor que queremos es tan importante como el amor que ofrecemos.
Si usted quiere alcanzar un estado de felicidad, vaya más allá de su ego. Renuncie a la necesidad de control, a la necesidad de tener aprobación y la necesidad de juzgar. Estas son exactamente las tres necesidades que caracterizan al ego.Compartir
El ego no tiene idea de lo que es el amor
Hay parejas que terminan, vuelven, terminan, vuelven y establecen una dinámica exhaustiva y destructora. Muchas veces esto sucede porque uno de los dos quiere continuar en las primeras fases de la pasión, impidiendo la relación de madurar y crecer.
Los "ex" que viven un amor basado en el propio ego piensan que todavía tienen derechos sobre sus ex-socios y tratan de reclamar esos derechos principalmente cuando ven cómo los antiguos compañeros refirieron sus vidas. Muchas veces el "ex" piensa que tiene el derecho de entrar y salir de la vida de su antiguo compañero y exigir los espacios ordenados y ventilados que la otra persona consiguió recrear con mucho esfuerzo. En ese sentido, no hace ningún bien volver con un antiguo compañero para pasar por las mismas cosas, para volver a destruir el espacio que el otro se esforzó tanto para reconstruir. Por eso, si fuimos nosotros quienes realizamos ese duro trabajo, en un ejercicio de justicia para con nuestro esfuerzo, lo mejor a hacer es reflexionar sobre la decisión, por más que el corazón quiera hablar más alto.
Piense que muchas personas tratan de reanudar una relación siguiendo la famosa frase "más vale un mal conocido que un bueno a conocer". Otros lo hacen por miedo a la soledad y otras aún porque no tienen a nadie para alimentar su ego, a nadie que realice sus deseos o diga cómo son buenas. En estos casos, estas personas no valen la pena.Disculparse no siempre significa que estás equivocado y que la otra persona está segura. Simplemente significa que valoras más tu relación que tu ego.
Compartir Aguas pasadas ... mueven molinos? Después de un término, puede surgir un gran deseo de volver con aquella persona con quien compartimos tantas experiencias. Pero ... tenga mucho cuidado. Según expertos, cuando estamos considerando este paso, pensar en él por un tiempo puede ser muy positivo antes de realizarlo efectivamente. En ese tiempo, tenemos una tarea a cumplir:
identificar los motivos por los que queremos volver, tanto los motivos de la otra persona como los nuestros, y analizarlos.Por ejemplo, creer que el otro va a cambiar alguna de las cosas que no nos gusta es crear una expectativa que difícilmente va a concretarse. Por otro lado, si retomamos el contacto con esa persona, necesitamos tener gusto de su forma de ser, de sus virtudes y de sus defectos, pero sabiendo que aquellas cosas de las que no nos gusta pueden acabar de nuevo con la relación.
Volver o no volver con un ex compañero es una decisión extremadamente importante, así que no debemos tomar esa decisión por impulso.
Es verdad que podemos escuchar ese impulso e incluso ponerlo en la balanza, pero un término anterior y el esfuerzo que hicimos para reparar los daños causados merecen una postura con un poco de prudencia, una postura que no provoque miedo. "Quiero paz. Yo es el ego, quiero es el deseo; elimine el ego y el deseo y usted tendrá la paz. "
-Sri Sathya Sai Baba-
